TIEMPOS LITÚRGICOS:

ADVIENTO

El Tiempo litúrgico de Adviento, que se inicia a fines de noviembre, concluirá el día 24 de diciembre al mediodía, comprende las cuatro semanas que preceden a la Navidad.

La Iglesia espera y prepara el “advenimiento” de Jesús mediante la purificación del corazón en clima de alegre esperanza.

El Tiempo de Adviento quiere:

*Recordarnos, para que la celebremos y contemplemos, la venida histórica de Jesús en la “humildad de nuestra carne”, es decir, el nacimiento de Jesús en Belén.

*Prepararnos para la venida de Jesucristo en “la majestad de su gloria” como Señor y como Juez de todas las naciones.

*Invitarnos a vivir la venida de Jesucristo en nuestra vida diaria, y, a través nuestro, en el mundo de hoy.

Las obras de amor, son la mejor señal de nuestra fe en Jesucristo, y el camino más eficaz para salir al encuentro del Señor que viene.

NAVIDAD

El Tiempo litúrgico de Navidad celebra el nacimiento y la manifestación de Jesús, que viene a iluminar nuestras tinieblas; él es el “Emmanuel”, es decir, el “Dios con nosotros”.

En este tiempo se celebran también la fiesta de la Sagrada Familia- el día 26- ; las solemnidades de Santa María, Madre de Dios- 1º de enero; de la Epifanía – 6 de enero- y la fiesta del Bautismo del Señor.

* En el día de Navidad festejamos la humildad del Hijo de Dios hecho hombre. En Jesús, Dios ha mostrado su rostro humano para salvarnos y amarnos desde la tierra.

*En la Epifanía celebramos la manifestación del Hijo de Dios a todos los pueblos (los magos “venidos del Oriente” representan al mundo pagano ( = no judío).

* Y, todo el proceso de la “manifestación” de Dios, se completa en el Bautismo de Jesús, donde el Padre lo proclama como “su Hijo predilecto”.